Normando Álvarez García sostuvo que «no sorprende» la decisión impuesta por la interventora del CEDEMS, cuya finalidad es «hacer política». «Para eso la pusieron», sentenció y observó que su rol es «orientar al gremio docente hacia una posición opositora» al Gobierno de la Provincia.
Dijo que «ello se evidencia en una convocatoria a paro cuando la instancia paritaria no está cerrada y la propuesta salarial no está definida».
Asimismo, aseguró que «bajo ningún punto de vista y de ninguna manera, aceptaremos un Baradel en Jujuy».
Por otra parte, informó que los días no trabajados serán descontados, puesto que «es lo que corresponde», acotó.
No descartó la posibilidad de que el Ministerio de Trabajo y Empleo convoque a conciliación obligatoria.
En otro orden, enfatizó que, ante la intransigencia del CEDEMS, el Gobierno de la Provincia «redobla su apuesta al diálogo». «Seguiremos en conversaciones, buscando un acuerdo que favorezca los intereses de los docentes, al igual que con los otros gremios que nuclean a los trabajadores estatales», garantizó.
«Cuando se hace política desde un gremio, no es bueno para la sociedad, en este caso porque los jóvenes son los que se quedan sin clases», argumentó.
Finalmente, Álvarez García insistió: «Sabemos que el propósito central de la interventora del CEDEMS y de quienes la pusieron en el gremio, es que no haya clases en Jujuy».
