A Mirta Rosa Guerrero la conocen todos como Shakira. El apodo le quedó de sus primeros años como mano derecha de Milagro Sala. A la dirigente social la lleva en la piel, con un tatuaje en una pierna.
Este domingo, en una entrevista con Jorge Lanata en Periodismo para Todos, Shakira -que supo agredir y se la vio en los famosos videos sacando plata del banco- reveló detalles del entramado de corrupción, violencia y absurdo de la líder de la Tupac Amaru en Jujuy.
«La plata iba a su casa, ella tenía dos placards con doble fondo donde quedaba y se la contaban», dijo Shakira. Pocas personas conocen con tanto detalle los manejos de Sala.
Es que con ella trabajó durante 26 años. Y, por ella, como dio a entender en la entrevista con Lanata, fue a prisión. Pero desde entonces no habla con la dirigente social, a quien calificó como «monstruo». Ahora es arrepentida judicial.
Guerrero estuvo en la cárcel después de que su figura apareciera en un alevoso video que dejó en el centro de la polémica a la organización Pibes Villeros. Las imágenes, registradas el día anterior a la asunción de Mauricio Macri, retrataron a un grupo de personas -entre ellas Shakira- sacando 14 millones de pesos del Banco Nación de San Salvador de Jujuy. Fue investigada y condenada a seis años de prisión por «asociación ilícita y fraude a la administración pública».
Tras cumplir dos tercios de la pena, quedó en libertad condicional en octubre pasado.
«La plata iba a la casa de Milagro Sala. Directamente a la casa de Milagro Sala. La recibían, se la contaban. Ella tenía dos placards con doble fondo, era ahí donde quedaba la plata», le dijo Shakira a Lanata.
En la conversación con el periodista se refirió a las múltiples propiedades de la dirigente social kirchnerista. También destapó cómo Sala armaba extensas comitivas que viajaban al exterior, incluidas visitas al papa Francisco en El Vaticano.
«Tenía seis meses una camioneta y ya le parecía vieja, había que cambiarla», agregó sobre los consumos suntuosos de la líder de la Tupac Amaru.
En otro tramo de Periodismo para Todos, describió cómo eran los viajes al exterior: multitudinarios, en primera clase y con extraños manejos de dólares.
«La primera vez que fuimos a ver al Papa, ella dice que fue una invitación, ponele que así fuera para ella, pero no puede haber una invitación para 16 personas, incluyéndolo siempre al marido de ella (Raúl Noro) y a su hijo (Sergio)», describió Shakira.
Y pasó a hablar del dinero que llevaba cada integrante. «Cuando partíamos, nos daban 10 mil dólares a cada uno. Al llegar a destino se los teníamos que devolver y ella nos daba un viático, un porcentaje para nuestros gastos», recordó.
Remarcó que Sala siempre se manejaba en efectivo: «Dice que las tarjetas (de crédito o débito) quedan marcadas«. Además, explicó el porqué de comitivas tan numerosas. «Cuanto más grande sea su séquito, porque era eso de querer llevar a todo el mundo, era justamente para poder trasladar la plata para otro lado«, aseguró.
En ese sentido, rememoró otro viaje: a China, donde el hijo de Sala se sometió a una terapia con células madre por una enfermedad. «Tuvo la posibilidad de hacer el tratamiento, la felicito, ¿pero hacía falta que llevara tanta gente? Diez, once personas fuimos«.
Los viajes, añadió Shakira, se hacían en primera clase: «Cuando no se conseguía la totalidad en primera clase, uno o dos iban para atrás. Pero después, todos en primera«.
La indumentaria que utiliza Sala fue otro asunto de conversación entre Guerrero y Lanata. «A ella le gusta todo lo que sea marca«, expresó la ex colaboradora de la dirigente, antes de ventilar cómo camuflaba grandes marcas debajo de diseños autóctonos.
«Le vas a ver una remera puesta que tiene un bordado de un inca, ponele, y abajo es Cardón, Lacoste. Se compraba ropa de marca, la llevaba al textil y el textil le tenía que sacar el bordado y poner el nuevo bordado. De la misma forma los jeans que usó, el calzado que usó», profundizó.
Violencia en la Tupac Amaru y la visita de Alberto Fernández a Milagro Sala

Shakira, que ratificó a Milagro Sala como «un Estado paralelo» en Jujuy, sacó a la luz episodios de violencia en la Tupac Amaru, con su líder como protagonista. Así, la tildó de «monstruo» y dijo que es «todo lo contrario al feminismo».
«Milagro siempre fue violenta. Siempre. ¿Viste que ahora estamos con el feminismo y todo eso?», le preguntó a Lanata. «Ella es al revés. Ella saltó toda la vida a favor de los hombres y en contra de las mujeres».
Para ejemplificarlo evocó un episodio que sufrió en carne propia: «A mí me pasó, lo juro por Dios, que una vez estuve en su casa y me tiraron una colcha y me empezaron a pegar. Cinco hombres, fuerte, grande. Me pegaron piñas y patadas. Y ella mirándolo».
—¿Por qué lo hizo? —consultó el conductor de PPT.
—Sí, exactamente eso es lo que me hicieron.
—Y te dolió…
—Traté de que no me dolieran los golpes, lo juro por Dios. Era la bronca que tenía. La miraba a ella y ella se cagó de risa. Imaginate si eso me hizo a mí, que dejé a mi familia para trabajar con ella. Me podrás decir que podría haber decidido (hacer otra cosa), pero en aquella época no se podía decidir, no había trabajo. Yo tenía que pensar en mi familia —llegó a contestar antes de romper en llanto.
También se refirió a la visita de Alberto Fernández a Milagro Sala, a fines de junio.
«Me dolió. Había otras cosas para priorizar, en vez de verla a ella por el tema de salud. Yo también estuve mal de salud y no me fueron a ver. Tengo compañeras que la están pasando mal, prácticamente abandonadas», expresó en un diálogo revelador en PPT.
—Quería ver si yo resistía golpes.
—¿Era como una prueba?
—Exactamente —respondió Shakira, con los ojos vidriosos.
—Te hicieron lo que los chicos llaman una malteada…
—Sí, exactamente eso es lo que me hicieron.
—Y te dolió…
—Traté de que no me dolieran los golpes, lo juro por Dios. Era la bronca que tenía. La miraba a ella y ella se cagó de risa. Imaginate si eso me hizo a mí, que dejé a mi familia para trabajar con ella. Me podrás decir que podría haber decidido (hacer otra cosa), pero en aquella época no se podía decidir, no había trabajo. Yo tenía que pensar en mi familia —llegó a contestar antes de romper en llanto.
También se refirió a la visita de Alberto Fernández a Milagro Sala, a fines de junio.
Me dolió. Había otras cosas para priorizar, en vez de verla a ella por el tema de salud. Yo también estuve mal de salud y no me fueron a ver. Tengo compañeras que la están pasando mal, prácticamente abandonadas«, expresó en un diálogo revelador en PPT.


















































