El caso ocurrió la noche del 25 de noviembre de 2017, en un departamento de Nueva Córdoba. Durante un encuentro sexual, Brenda Barattini le cortó casi por completo el pene a su amante, Sergio Aníbal Fernández, utilizando una tijera de podar.
El hombre logró escapar al palier del edificio y pedir ayuda mientras perdía sangre. Una vecina enfermera le brindó los primeros auxilios.
En principio, Barattini sostenía que el hombre la había violado y que por eso lo atacó, pero la investigación encontró cartas, planes y evidencia digital que reforzaron la acusación en su contra. “Pensé lastimarlo. Planifiqué lastimarlo. Quise herirlo, no más que eso”, reconoció más tarde.
Un jurado popular, conformado por cuatro hombres y cuatro mujeres, decidió condenarla por unanimidad: fue condenada a 13 años de prisión por “tentativa de homicidio calificado por el vínculo y alevosía” contra su amante.
Brenda Barattini estaba habilitada para solicitar la libertad condicional recién el 25 de noviembre de 2026. Sin embargo, la realización de numerosos cursos dentro del penal le permitió acceder a un adelanto de diez meses y tres días. Ese beneficio, sumado a las evaluaciones favorables sobre su conducta y su proceso de reinserción, derivó en la resolución que firmó el juez Facundo Moyano Centeno.
La mujer pasó ocho años presa y accedió de esta manera a la libertad condicional. Si bien recupera la libertad ahora, la pena completa vence en noviembre de 2030.
La libertad se hizo efectiva el martes 18 de noviembre.

















































