El diputado Julio Cobos presentó un proyecto de ley para legalizar la eutanasia y la muerte asistida en nuestro país, inspirado en la reciente aprobación de esta práctica en Uruguay, el primer país de Latinoamérica en sancionarla.
La iniciativa busca que los pacientes con enfermedades graves e incurables puedan acceder a una muerte asistida, con acompañamiento médico y consentimiento informado. Esto es que un médico administre directamente la sustancia que provoque la muerte del solicitante, o que prescriba o proporcione la medicación necesaria para morir y que el solicitante sea quien se la autoadministre.
Para llevar a cabo la solicitud, se deberán cumplir una serie de requisitos obligatorios a fin de dar acceso a cualquiera de las dos modalidades: Quien lo solicite tiene que ser mayor de edad, argentino o residente de no menos de doce meses en el país. Debe padecer una enfermedad grave e incurable o un padecimiento crónico e imposibilitante, además de haber recibido información médica completa sobre sus posibilidades, incluyendo las opciones disponibles de cuidados paliativos.
Según el texto del proyecto de ley, la persona que aspire a la eutanasia o a la muerte asistida, también conocida como suicidio asistido, debe presentar dos solicitudes con un intervalo mínimo de quince días, con testigos y la validación de un juzgado o un escribano. Debe manifestar el consentimiento informado, y puede revocar su decisión en cualquier momento de proceso.
Es la tercera vez que Cobos presenta un proyecto de legalización de la eutanasia y la muerte asistida. Ya lo había hecho una vez en la Cámara de Diputados y otra en el Senado.
Por otra parte, la iniciativa contempla la objeción de conciencia para aquellos profesionales que decidan no participar de estas prácticas, a la vez que establece que los centros públicos y privados de salud deben garantizar el acceso al procedimiento en caso de que el solicitante cumpla con los requisitos y mantenga su voluntad. Además, impulsa la modificación del Código Penal de cara a que quienes asistan la práctica no puedan ser denunciados como autores de un delito.
















































