En la reunión del martes pasado hablaron pocos pero en la Primera Nacional hay mucha expectativa en cuanto a la forma de disputa de los ascensos. Es real lo que Marcelo Achile, el presidente de la Mesa, le expresó a Claudio Tapia en la carta que le envió ayer: “La única resolución que se tomó fue la creación de una comisión compuesta por 8 entidades a fin de poder elaborar una propuesta sobre cómo disputar los ascensos. La discusión sobre la materia se extenderá hasta el 15 de septiembre”. Pero claro, no deja de llamar la atención la fecha fijada, ya que muchos dirigentes quieren saber a qué van a jugar para determinar si se refuerzan mucho, poco o nada.
A todo esto, anda circulando un bosquejo de torneo que tiene tantos adeptos como críticos. Y se estima que podría ser la base de un Reducido que finalmente se confirme recién para mitad del mes que viene. “Pusieron esa fecha para esperar el fallo del TAS sobre San Martín de Tucumán”, alerta un directivo, pero con una audiencia por delante y una posterior resolución, ni siquiera se sabe si en Suiza habrá respuesta para ese entonces.
El torneo que algunas fuentes filtraron habla de dividir a los equipos en dos grupos: 12 por un lado y los 20 restantes por el otro. Los 12 serían los primeros seis de cada zona y competirían primero del tercero al sexto, cruzados. El 1° y 2° de cada grupo recién entrarían en cuartos y seguiría la ventaja deportiva, algo que se perdería en semifinales y final. De ese Reducido, saldría el primer ascenso. Pero los 11 que no lo consiguieran, tendrían otra chance porque se irían sumando al grupo de 20, que se habrían ido eliminando por etapas. De ese modo, intentarían “pagarles” a los que hicieron mejor campaña para que no se quejen de que Chicago y Gimnasia de Jujuy, por ejemplo, que se estaban yendo al descenso, ahora tengan la chance de subir a la Liga jugando apenas un puñado de partidos postpandemia.
Pero a pesar de que la incertidumbre es mucha, en la categoría no piensan apurarse. Varios equipos mantuvieron sus bases y a sus entrenadores a pesar de la crisis, pero por ejemplo San Martín, que era uno de los líderes, está desmantelado porque no pudo afrontar un alto presupuesto. Así las cosas, aunque algunos están urgidos, parece que habrá largo tiempo para debatir y armar el mejor torneo.
Fuente; Diario OLÉ.