En el marco del debate para eliminar el Impuesto a las Ganancias, el sindicalismo se concentra este martes en las inmediaciones del Congreso para respaldar el proyecto anunciado por el ministro de Economía, Sergio Massa.
De la concentración participa la CTG, las dos CTA y otros sectores gremiales, los cuales se convocaron a las 11 en los alrededores de la Cámara de Diputados. Allí, cerca de las 13:30, el oficialismo consiguió quórum para tratar los cambios impulsados.
Las primeras columnas de manifestantes arribaron al lugar dos horas antes del inicio de la sesión. Se asentaron sobre la avenida Entre Ríos, donde más tarde comenzaron con el armado del escenario en el que se llevará adelante el acto principal de la jornada y se espera que hable el candidato a presidente de Unión por la Patria.
La sesión especial fue convocada en la Cámara Baja por el Frente de Todos que el lunes logró aprobar el dictamen de mayoría en la Comisión de Presupuesto, con 25 firmas, mientras que Juntos por el Cambio avaló un dictamen de rechazo.
Pasadas las 12 del mediodía, los sindicalistas ya ocupaban gran parte de la Plaza del Congreso y agentes de tránsito de la Ciudad de Buenos Aires desplegaron un operativo a fin de ordenar la circulación de vehículos y peatones en la zona.
En este sentido, se desvió a los autos y transportes públicos que pasan por los alrededores del lugar y se les indicaron caminos alternativos por las calles contiguas más alejadas de la manifestación. Están cerradas las inmediaciones del Congreso con un corte total que abarca la calle Entre Ríos desde Belgrano, Callao y Rivadavia, y Av. de Mayo desde Lima.
Asimismo, desde la línea A del subte anunciaron que sus formaciones no se detendrán en la estación Congreso -ubicada en Rivadavia y Callao- hasta nuevo aviso.
La movilización de este martes fue convocada tanto por la Confederación General del Trabajo (CGT), conducida por Héctor Daer (Sanidad), Pablo Moyano (Camioneros) y Carlos Acuña (estaciones de servicio), como las dos CTA, la versión kirchnerista, encabezada por Hugo Yasky, y la combativa, que lidera Hugo “Cachorro” Godoy (ATE).
Además, se sumaron la Confederación de Trabajadores del Transporte (CATT), dirigida por Sergio Sasia (Unión Ferroviaria), el Frente Nacional para el Modelo Sindical (que integran el moyanismo y sindicalistas K) y la Corriente Federal de Trabajadores (donde están el bancario Sergio Palazzo y otros dirigentes kirchneristas).
Incluso se movilizan sindicatos alineados con Barrionuevo a pesar de que su jefe político adhiere a la candidatura de Milei, como la Unión de Trabajadores de Carga y Descarga, que lidera Daniel Vila; el Sindicato Unico de Guardavidas, cuyo titular es Roberto Solari; la Federación de Viajantes de Argentina, piloteada por Luis Cejas, y el Sindicato de Maestranza, que encabeza Oscar Rojas, entre otros.
Esta marcha graficará el apoyo de la mayoría de las corrientes sindicales a la candidatura presidencial del ministro de Economía, en forma simultánea con el impulso del líder gastronómico Luis Barrionuevo de armar un sector que milite en favor de Javier Milei.
El proyecto que apoya el sindicalismo
Hace una semana, Massa hizo una de sus máximas apuestas en la campaña al anunciar el proyecto para eliminar el Impuesto a las Ganancias en un acto callejero ante el Ministerio de Economía: allí, frente a la plana mayor del gremialismo y manifestantes de las tres centrales obreras (la CGT y las dos CTA), el ministro-candidato confirmó que elevaría al Congreso una iniciativa sobre el tema y anunció que impulsará un decreto para subir el mínimo no imponible y lograr que desde octubre paguen Ganancias sólo 90.000 trabajadores de sueldos altos y jubilados de privilegio.
Massa, vitoreado por manifestantes de los gremios más poderosos, relanzó de esa manera la campaña más decisiva para intentar revertir en octubre el tercer puesto logrado en las PASO. El candidato oficialista estaba seguro de que iba a ser el más votado, pero no lo consiguió y quedó detrás de Milei y de Juntos por el Cambio.
Con su anuncio sobre Ganancias, el impuesto más denostado por los trabajadores y que fue el eje de promesas de eliminación por parte de Mauricio Macri, Massa se reacomodó en un terreno que se perfilaba muy resbaladizo para captar más votos.
Ahora, con el tratamiento de la iniciativa en el Congreso y la escenificación del apoyo sindical, el candidato oficialista avanza con su objetivo de entrar en el balotaje gracias a la promesa que viene haciendo: “Seré el presidente de todos los trabajadores”.